En esta temporada es la última que se juega con formato de final directa, el año que viene se estrenará el formato aún hoy vigente de la final four. En las dos fases previas todo discurrió con cierta normalidad y las primeras espadas de Europa no se perdieron la liguilla. El Zadar y el Orthez francés son los nuevos inquilinos de la liguilla.
El Olimpia Milan venció al Murray BC en la primera ronda y al Aris Salónica en la segunda
El Maccabi venció al Pully Basket en la primera ronda y al Torpan Pojat en la segunda
El Orthez venció al Partizani en la primera ronda y al Bayer Leverkusen en la segunda
El Zadar venció al Bertrange en la primera ronda y al Levski en la segunda
El Zalgiris Kaunas venció al Steaua Bucarest en la primera ronda y al Galatasaray en la segunda
El Real Madrid venció al Manchester United en la primera ronda y al Brno en la segunda
En la liguilla regular Milan y Maccabi marcaron el ritmo desde el principio. Seguidos bien de cerca por la revelación del año, el Orthez. Tras el Zadar y un Zalgiris sin Sabonis, el Real Madrid terminó como último clasificado en una temporada muy gris.
LIGA REGULAR
1. OLIMPIA MILAN (7-3)
2. MACCABI (7-3)
3. ORTHEZ (6-4)
4. ZADAR (4-6)
5. ZALGIRIS (3-7)
6. REAL MADRID (3-7)
El partido comenzó con ambas
escuadras defendiendo en individual, con unos emparejamientos durísimos que
echaban chispas (especialmente el de Dino Meneghin con Kevin Magee). La
igualdad era la tónica predominante, y de esta forma ni Tracer ni Maccabi
consiguieron irse en el marcador durante toda la primera mitad, con ventajas de
uno y otro que no superaron los cuatro puntos (2-6 a favor del Maccabi; 31-27 a favor de la Tracer , min. 16). Al
descanso se llegó con una exigua ventaja de los israelíes (33-36), entre más
fallos que aciertos por parte de ambos conjuntos. Únicamente Jamchy destacó en
el tiro exterior en esta primera parte. El Maccabi, pese a su ventaja en el
marcador, comenzaba a dar muestras de lo que sería una de las claves de su
derrota final: el desacierto en los tiros libres (12 lanzamientos
desperdiciados a lo largo de todo el partido).
La segunda mitad continuó por los
mismos derroteros: mientras que la
Tracer dependía de su juego interior, el Maccabi conseguía
casi todos sus puntos mediante lanzamientos más o menos alejados del aro. Los
italianos lograron ponerse por delante mediada la segunda parte (52-50) gracias
a una serie de 4/4 de Barlow, y posteriormente alcanzaron su máxima ventaja de
todo el partido (58-52, min. 31), aunque un Johnson que se multiplicaba en
defensa y en ataque evitó que la
Tracer se despegara de forma definitiva. A tres minutos del
final, un escalofriante triple de Premier permitió a la Tracer obtener una ventaja
de cinco puntos (66-61) que a estas alturas del partido parecía ya casi
definitiva. Pese a que Dino Meneghin se resintió de una contractura muscular en
su pierna izquierda, el bravísimo pívot italiano, tras un masaje en pista,
decidió continuar en el partido hasta el final para intentar lograr su sexta
Copa de Europa.
En medio de una gran igualdad, el
partido entra en su fase decisiva y los acontecimientos se suceden con gran
rapidez: a falta de 1’35’’, con 69-67
a favor de la
Tracer , D’Antoni comete su quinta falta personal y debe
abandonar la pista (aunque con un “rebote” considerable, golpeando todo y a
todos en su camino hacia el banquillo). A falta de 1’12’’, dos tiros libres de
McAdoo abren una pequeña brecha en el marcador (71-67). A falta de 52’’, Magee
acorta distancias desde la línea de personal (71-69). A falta de 28’’, Premier
intenta penetrar a canasta, Magee mete la mano, el balón queda suelto entre
varios jugadores y los árbitros decretan un salto entre Meneghin y Magee. La Tracer recupera el balón y
McAdoo asiste a Meneghin para una fácil bandeja, aunque el pívot italiano se
confía en exceso —o quizá es debido al dolor en su pierna izquierda lesionada—
y el balón, después de dar una vuelta completa al aro, se sale. Quedan 16
segundos para el final y los seguidores milanistas, que ya estaban celebrando
la victoria, enmudecen al ver cómo la última posesión del partido corresponde
al Maccabi. Lippin es el encargado de organizar un último ataque para empatar o
incluso ganar el partido, pero el base macabeo, incomprensiblemente, deja pasar
el tiempo sin buscar un pase interior a Johnson o Magee que asegure la canasta
o la falta personal, y en su lugar deja toda la responsabilidad a Jamchy quien,
desde más allá de ocho metros y con dos defensores encima, lanza a la
desesperada un tiro que ni siquiera toca el aro. La Tracer conquistaba de esta
forma, 21 años después, el máximo trofeo continental entre el delirio de sus
aficionados, que invadieron la cancha para celebrar la victoria.
OLIMPIA MILAN 71
*D`antoni - 7p, 6r, 4br.
*Premier - 23p, 6r, 2br.
*Barlow - 18p, 5r, 2t.
*McAdoo - 21p, 9r, 3a.
*Meneghin - 2p, 7r, 1br.
Bargna - 0p.
Boselli - 0p, 1r.
Pittis - 0p, 2r.
Gallinari - 0p.

MACCABI ELITE 69
*Lippin - 1p, 3br, 1r.
*Jamchy - 15p, 1r, 1br.
*Lassof - 4p, 3r.
*Magee - 16p, 7r, 3br.
*Johnson - 24p, 12r, 2t.
Berkowitz - 9p, 4r, 1a.
Cornelius - 0p, 1r.
Aroesti - 0p.